El viento, la neblina, la lluvia o en algunas regiones, la nieve y el hielo, influyen en la visibilidad, tracción y otros aspectos que obligan al conductor a tomar precauciones antes y durante el viaje.
Con el objetivo de afrontar estas condiciones satisfactoriamente, DFSK GLORY, te brinda algunas recomendaciones para conducir con seguridad:
1. Banda de rodamiento:
Revisa periódicamente la banda de rodamiento de los neumáticos. Esta es la parte que se encuentra en contacto directo con la pista, por ello, verifica que no presente un desgaste pronunciado, clavos, cortes o bultos. En caso encuentres alguno de estos problemas, debes repararlo inmediatamente para evitar fallas o pérdida de agarre.
2. Faros y Neblineros:
Debido a que la lluvia reduce la visibilidad, es importante contar con luces en buen estado tanto las altas, bajas, intermitentes y de freno.
Si viajas constantemente por rutas donde la neblina es muy densa, se recomienda contar con faros neblineros.
También es fundamental que el limpia parabrisas y los sistemas de climatización, la cual evitan el empañamiento o condensación en las ventanas, funcionen correctamente.
Si viajas constantemente por rutas donde la neblina es muy densa, se recomienda contar con faros neblineros.
También es fundamental que el limpia parabrisas y los sistemas de climatización, la cual evitan el empañamiento o condensación en las ventanas, funcionen correctamente.
3. Llantas:
El agua de la lluvia, al mezclarse con el polvo y la grasa de las calles, puede reducir la adherencia de las llantas hasta en un 50%. Esto aumenta la probabilidad de perder el control del vehículo ante alguna situación inesperada. Por ello, conduce siempre con precaución respetando los límites de velocidad y no olvides comprobar la presión de aire del neumático por lo menos una vez al mes o antes de un viaje largo. Esto te dará mayor seguridad en la conducción y evitarás alguna parada de emergencia.
4. Sistema de Frenos:
En base al punto anterior, es importante resaltar que la distancia de frenado, en pista mojada, es mayor. Por ello, revisa que el sistema de frenos funcione correctamente. Es importante que revises el desgaste de las pastillas de freno y el líquido en cada mantenimiento que realices al vehículo. En promedio debes realizar una limpieza al sistema de frenos cada 10 mil kilómetros y reemplazar las pastillas cuando haya alcanzado el degaste máximo permitido, esto varía de acuerdo a cada fabricante.
5. Obstáculos en carretera:
Evita pasar sobre charcos, ya que es difícil saber la profundidad; de esta manera evitarás tener algún tipo de accidente. En caso de que alguno te sorprenda y no puedas cambiar de carril, reduce la velocidad y coge el volante con ambas manos.